
Consejos para criar un gato amigable
Compartir
Los gatos pueden ser conocidos por ser distantes, pero eso no significa necesariamente que no sean amigables por naturaleza. Todos los amantes de los gatos saben que un gato probablemente acudirá a ti cuando esté listo y es muy improbable que quiera que lo mimen a menos que sea bajo sus condiciones. Claro que algunos gatos son más amigables por naturaleza, mientras que otros simplemente prefieren que los dejen en paz.
No tiene nada de malo; sin embargo, si tienes la oportunidad, ¿por qué no usar algunos consejos y trucos para animar a tu gato a ser más amigable? Los siguientes consejos son perfectos para familias con niños pequeños que quieran animar a sus gatitos a estar más tranquilos en zonas concurridas, así como para quienes simplemente quieran estar lo más cerca posible de su gato.
- Estar siempre disponible
Para empezar, el mayor cambio lo liderarás tú mismo. Por lo tanto, tendrás que estar presente para tu gato siempre que te necesite. Esto es más fácil cuando son gatitos, ya que su curiosidad aún no está lo suficientemente desarrollada como para mantenerlos demasiado lejos de ti.
Interactúa con tu gatito jugando, dándole sus comidas y golosinas favoritas y charlando con él. Al final, se acostumbrará tanto a tu compañía que considerará su proximidad como algo natural en su vida.
Publicación relacionada: Las mejores golosinas para gatos
- Sé amable
Los gatos son criaturas muy sensibles por naturaleza, por lo que no reaccionan bien a los ruidos fuertes, a los agarrones constantes ni a los castigos por ser, bueno, gatos. Si quieres animar a tu gatito a ser un gato faldero, tendrás que ser amable y cariñoso con él. Los gatos responden bien al amor, la calidez y la sensación de seguridad, todo lo cual deberías proporcionarle a tu pequeño peludo.
Si descubres a tu gato portándose mal, tómate un momento para asegurarte de no levantar la voz ni hacer nada que lo asuste. Si te cuesta mucho lidiar con algunas de las cosas naturalmente frustrantes que un gato puede traer a casa, como traer la cena o arañar los muebles , hay maneras de lidiar con esto que no incluyen el refuerzo negativo.
- Haz tiempo para jugar
Ya mencionamos que debes estar presente cuando tu gato quiera jugar, ¡pero no tengas miedo de iniciar el juego también! Es prácticamente imposible que tu gato quiera acurrucarse todo el tiempo, así que asegúrate de hacer un esfuerzo extra para quemar algo de esa energía extra con juguetes geniales para gatos y divirtiéndote.
A los gatitos les encanta jugar un rato, así que si tienes un gato joven, asegúrate de añadirle tiempo extra de juego al llegar a casa. Incluso puedes añadirle algunas golosinas para un gatito que se porta bien y juega bien.
Publicación relacionada: Los mejores juguetes para gatos
- Sé cariñoso
Aunque esto no significa que debas agarrar a tu gato y acariciarlo sin parar, es muy buena idea animarlo a quedarse a tu lado cuando estés sentado viendo la televisión o algo similar. Quieres demostrarle que eres una persona confiable que nunca le hará daño, así que empieza con una o dos golosinas tentadoras. Animarlo a acercarse para obtener una recompensa le permitirá asociarte con sentimientos positivos y una barriga llena.
También puedes mostrarle cariño con delicadeza a tu gato cuando se haya echado una siesta. Demostrarle que solo quieres acariciarlo cuando duerme le demostrará que no buscas hacerle daño, cuando está más vulnerable. Si tu gato se aleja, déjalo; con el tiempo aprenderá que su cariño es una elección y será más probable que regrese contigo.
- Entrena a tu gatito
No hay conexión más profunda que la transmisión de conocimientos, y una de las mejores formas de lograrlo es mediante el entrenamiento. Lo más fácil de enseñar a un gato es que venga cuando lo llames; simplemente empieza llamándolo por su nombre mientras le ofreces una golosina. Cuando se acerque, repite su nombre en un tono positivo pero relajado.
A medida que gane confianza y empiece a salir, asegúrate de seguir dándole golosinas para que regrese sano y salvo. Esto evitará que se aleje demasiado y sabrá que su humano favorito tiene una golosina para él cada vez que lo llames. En esencia, esto le ayudará a asociarte con comida, felicidad y calor (tanto figurativamente como literalmente, al regresar a su casa), lo que hará que tu gato esté mucho más feliz de estar contigo y, por lo tanto, querrá pasar más tiempo contigo.
- Socializar
Si algo puedes sacar de todo esto, recuerda que, para tener un gato feliz, ¡necesitas socializar, socializar y socializar! Puedes hacerlo contigo mismo, con desconocidos o con otros animales. Simplemente asegúrate de presentarle siempre a tu gatito los nuevos entornos con cariño y de permitirle encontrar un pequeño escondite si es necesario.
Los gatos que pasan más tiempo con animales como perros aprenderán con el tiempo que estas criaturas nerviosas no representan una amenaza, sino que disfrutan jugando. Por otro lado, un gato que pasa mucho tiempo con la familia sabrá que los humanos más pequeños no les hacen daño y que los grandes traen mucha comida. En definitiva, esto los convertirá en gatos más felices y seguros, que disfrutan de la amabilidad de los desconocidos.
Es importante tener en cuenta que deberás asegurarte de que tu gato siempre tenga espacio para respirar. La interacción forzada no es socialización, y siempre debes darles un pequeño escondite cuando conozcan nuevas zonas o personas. Permíteles salir y socializar a su manera; agradecerán la ayuda.
- No trates a un gatito como si fuera un adulto
Al igual que las diferencias entre la adolescencia y la edad adulta en los humanos, los gatos y los gatitos tienen diferentes deseos y necesidades que debes conocer. Por ejemplo, un gatito necesitará comidas más frecuentes y en cantidades más pequeñas, ya que estará en la etapa de crecimiento rápido. Esta es una excelente excusa para animar a tu gatito a estar más tiempo contigo, ya que puede esperar de ti alimento y cuidados.
Mientras tanto, un gato adulto puede adquirir el hábito de orinar por toda la casa si no está castrado. También necesitará mucha paciencia para adaptarse a sus nuevos hábitos, como traer animales no deseados a casa y pasear por el vecindario. Enojarse por estos comportamientos, completamente naturales, solo generará resentimiento en tu gato, así que mantén la calma.
- Manténgase al tanto de su salud
Un gato solo será amigable si es feliz, y uno de los aspectos principales para mantenerlo feliz es asegurar su salud. Asegúrate siempre de que tu gato tenga un peso saludable y que reciba suficiente comida y agua. Permítele que gaste su energía en rascadores o árboles para gatos, o dejándolo salir a pasear con regularidad.
Publicación relacionada: La mejor torre rascadora para gatos
Si tienes alguna inquietud, lleva a tu gato al veterinario. Dado que los gatos no pueden decirnos cómo se sienten ni si sienten dolor, siempre es mejor que lo revisen ante cualquier síntoma sospechoso. Esto es fundamental cuando un gato está de mal humor, especialmente si es amigable. Un gato de mal humor puede ser señal de que tu gatito tiene dolor, lo cual puede deberse a diversas razones, así que asegúrate de que lo revisen lo antes posible si notas algo extraño en tu gatito.
En resumen, si quieres criar un gato cariñoso y amigable, tendrás que ser cariñoso y amigable tú mismo. Los gatos te obedecen, así que si no te apetece pasar mucho tiempo con ellos a lo largo del día, no te sorprendas cuando crezcan y tampoco quieran pasar mucho tiempo contigo.
Fuentes:
- Conozcamos 7 de las razas de gatos más amigables – Catster
- Consejos para criar un gato amigable – MissionCats